¿Para qué?
¿Para qué cuidar de esa persona que supuestamente te importa y de la que estás enamorada?
¿Para qué?
Y es que la boca se mueve mucho, expresando mentiras que deseamos escuchar y que sean verdad. Con el tiempo cada una de ellas se va expresando y saliendo de su escondite para dar lugar a una verdad.
"Te cuidaré y te esperaré, te quiero."
Me das asco. Soltar frases sin sentirlas ni cumplirlas son como cuchillas arrastrándose con fuerza por la piel, rasgándola y dejando cicatrices a su paso.
No me mereces la pena. Cuidar de lo que te importa, estar a su lado cuando está mal, comprenderla, sin embargo, cuando llega su turno porque tú estás mal, gira la cabeza para otro lado diciéndote que "a ver sí se te pasa pronto" o cualquier mierda pasajera que se le ocurra.
¿Para eso te quiero a mi lado? Tengo amigas que hacen el triple que tú y encima no me hacen sufrir. No eres nada más que palabras vacías.